Ritual en honor a la Virgen de Fátima

Hoy, 13 de mayo, día bendito en que la Virgen de Fátima hizo su primera aparición en Cova da Iria, se abre un portal de fe, milagro y protección. Aprovecha este momento para consagrarte a su luz y pedirle que aleje toda maldad, peligro, envidia y oscuridad de tu vida.

Necesitarás:  

•    1 vela blanca (representa su pureza)
•    1 imagen o estampa de la Virgen de Fátima
•    Agua bendita (o agua que hayas rezado)
•    Sal marina o gruesa
•    1 pañuelo o pedazo de tela blanca
•    Papel y bolígrafo
•    Flores blancas (si puedes conseguir)
•    Un rosario (opcional, pero muy recomendado)

Realízalo preferiblemente hoy al mediodía o al anochecer. Prepara un pequeño altar: pon la imagen de la Virgen en el centro, coloca la vela blanca al frente, las flores si tienes, el cuenco con agua y el pañuelo extendido como base. Escribe en el papel tu nombre y los de tus seres queridos. Escribe también tu intención de protección:
“Virgen de Fátima, cúbrenos con tu manto. Aleja de nosotros todo mal físico, espiritual y emocional. Llénanos de tu paz y tu luz.” 

Dobla el papel tres veces y colócalo sobre el pañuelo blanco. Agrega una pizca de sal encima como sello protector. Enciende la vela blanca y di esta oración con fe:

“Hoy, 13 de mayo, te invoco, Virgen de Fátima.
En este día de tu presencia santa,
te pido que rodees mi vida de luz,
que cierres mis caminos al mal
y abras mis puertas a la paz y la bendición.
Sé mi refugio y mi escudo.”

Toma un poco de agua bendita y haz la señal de la cruz en tu frente. Si estás con otros, hazla también sobre ellos. Luego, con la mano mojada, rocía las esquinas de tu casa para bendecir y proteger tu hogar. Reza un misterio del rosario o al menos un Ave María con todo tu corazón. Si no sabes rezar, basta con hablarle desde el alma. Cuando la vela termine de arder, guarda el pañuelo con el papel y la sal en una bolsita blanca. Guárdalo en tu altar, en tu cuarto o en una planta que tengas en casa. Quedará como escudo de protección activa. Haz este ritual con devoción y confía en que la Virgen de Fátima ya está obrando en tu vida. Que su manto te cubra. Que su paz te envuelva. Que su bendición te proteja.