¡La importancia de vivir la Semana Santa!

Vivir la Semana Santa es acompañar a Jesús con nuestra oración, sacrificios y el arrepentimiento de nuestros pecados. Desde casa, debemos asistir al sacramento de la penitencia para morir al pecado y resucitar con Cristo el día de Pascua. Lo importante de este tiempo no es el recordar con tristeza lo que Jesús padeció, sino, entender por qué murió y resucitó; es celebrar y revivir su entrega a la muerte por amor al hombre y el poder de su resurrección que es primicia de la nuestra.

La Semana Santa fue la última semana de Jesús en la tierra, su resurrección nos recuerda que los hombres fuimos creados para vivir eternamente junto a Dios.

Este año se celebra del día 6 de abril al domingo 9 del mismo mes. El Jueves Santo será ese 6 de abril, el Viernes Santo el 7 de abril, el sábado de Gloria el 8 de abril, y finalmente, el Domingo de Pascua caerá el día 9 de abril.

Lunes Santo: es tiempo de agradecer lo entregado por Dios.

Martes Santo: abre tu corazón y deja entrar al Señor.

Miércoles Santo: es tiempo de pensar en todo lo vivido.

Jueves Santo: es el día en que se conmemora la Última Cena de Jesús con sus discípulos, en la que instituyó la Eucaristía y el sacerdocio. Este día es muy importante para la Iglesia Católica y otras denominaciones cristianas.

En algunos países, como España y países de América Latina, es tradicional realizar procesiones del Silencio durante la noche del Jueves Santo, en las que se recuerda la pasión de Jesús y se acompaña a las imágenes de Jesús y la Virgen María en su camino al Calvario.

Viernes Santo: este día recordamos la Pasión y Muerte de nuestro señor Jesucristo, su prisión, los interrogatorios por parte de Herodes y Pilatos, la flagelación, la coronación de espinas, el camino hacia el calvario cargando su propia cruz y finalmente su crucifixión. Conmemoramos con un viacrucis solemne y con la ceremonia de la adoración de la cruz.