Todo sobre Lilith, la Luna negra

Lilith representa la ruptura de todas las normas, pues simboliza el instinto y la inconsciencia. Su energía despierta la parte primitiva del ser humano. En muchas ocasiones se romantiza un poco su ímpetu independiente, pero lo cierto es que esta energía debe ser manejada con mucho cuidado, debido a la irracionalidad que personifica a la hora de exteriorizar su deseo de autonomía y auto pertenencia.

Lilith desde lo astrológico.

Lilith es un punto de antimateria que forma parte de la órbita lunar alrededor de la Tierra. Como se deriva de la primera Ley de Kepler, la órbita no es circular, sino que es elíptica, por lo que la Luna gira en torno a dos focos: uno es la Tierra, el otro es Lilith, la Luna Negra. Aunque desde la materia no existe, posee una fuerza gravitatoria lo suficientemente potente como para afectar la órbita lunar y la vida. Además, tiene relación con los nodos lunares. El tránsito de Lilith es de nueve meses por signo, por lo que cada nueve años, Lilith en tránsito, vuelve a pasar por el lugar de nacimiento de una persona.

Lilith tiene mucha relación con Quirón, ya que ambos hablan del rechazo, pero en Quirón genera una herida asociada con el abandono, es algo que drena y genera una especie de depresión. En oposición a esto, Lilith genera una herida en base al rechazo, pero con una acción inconsciente de agresividad y enojo. Es un principio que vitaliza para combatir.

El mito de Lilith.

El origen de Lilith es el mismo que el de la humanidad. Según algunas escrituras judías, Lilith fue la primera mujer de Adán. Ambos fueron creados del barro. Lilith quería ser dueña de su cuerpo y su placer, lo cual iba contra la voluntad de Dios y los deseos de Adán quién quería someterla a sus mandatos y a las posturas sexuales que él deseaba. Por lo cual, indignada y enfadada, pronuncia el nombre secreto de Dios y es expulsada del Edén.

Según el mito deambula por el mundo hasta que se asienta a orillas del Mar Rojo, donde se convierte en amante de varios demonios y engendra miles de hijos, que también son demonios.

La psicología de Lilith.

Lilith, al igual que la Pandora griega, es el prototipo de mujer rebelde y libre de todo convencionalismo, empoderada, la primera feminista de la historia, aquella que no se adaptó al patriarcado.

A su vez, esta mujer es el símbolo del exilio, pues fue puesta en la sombra y satanizada para evitar que las demás siguieran su ejemplo, su imagen fue usada en la inquisición para mostrar el castigo que traía consigo la subversión.

Actualmente, es notorio como el instinto y personalidad de Lilith ha ido tomando fuerza y su voz va escalando lugares y haciéndose escuchar en el mundo. En la carta natal, tanto de hombres como de mujeres, incorpora la feminidad exiliada de la consciencia, que rompía los mandatos y paradigmas impuestos por la sociedad.

Esta versión y punto antimateria es enojo y resentimiento, por una expulsión injustificada que impone la represión de los deseos, aun cuando no representen ningún daño para el prójimo.